Fort Worth Bugler, 18 de octubre de 1998

LA TRAGEDIA DE RACCOON CITY PUDO HABER SIDO UNA CONSPIRACIÓN PERPETRADA POR EMPLEADOS DE LA CIUDAD


Fort Worth, Texas — Los equipos de limpieza que trabajan en Raccoon City, Pensilvania, han encontrado nuevas pruebas que indican que el «síndrome de Raccoon», la enfermedad causante de la mayor parte de las 7.200 muertes, cifra oficial hasta el momento, que han tenido lugar en esa ciudad, puede haber sido extendido entre la desprevenida población por el jefe de policía de Raccoon City, Brian Irons, y varios miembros de la escuadra de tácticas especiales y rescates (los STARS) de la localidad. El portavoz del FBI, Patrick Weeks, el director de la ANCD, Terrence Chavez, y el doctor Robert Heiner (convocado por el jefe del equipo de Umbrella Corporation, el también doctor Ellis Benjamin) revelaron en una conferencia de prensa que tuvo lugar ayer por la tarde que existen importantes pruebas circunstanciales de que el desastre de Raccoon City fue consecuencia de un ataque terrorista que salió tremendamente mal. Los incendios posteriores que casi han arrasado la pequeña ciudad pueden haber sido un intento por parte de Irons y de sus cómplices de tapar los catastróficos efectos secundarios de la propagación de la enfermedad. Según Weeks, se han encontrado numerosos documentos entre las ruinas del edificio central de la policía de Raccoon City que implican a Irons como el jefe de toda la trama de una conspiración cuyo objetivo era asaltar y tomar por la fuerza la planta química de Umbrella Corporation situada en las afueras de la ciudad. Al parecer, Irons estaba furioso porque el equipo dirigente de la alcaldía había suspendido las actividades de los STARS a finales de julio por los tremendos errores que cometieron al efectuar la investigación de los múltiples asesinatos, los crímenes caníbales, ya bien documentados, y que costaron la vida a once personas el verano pasado. Los STARS de Raccoon City fueron retirados después de que se produjera un accidente de helicóptero en la última semana de julio, en el que murieron seis miembros del equipo. Los cinco miembros supervivientes fueron suspendidos de empleo y sueldo después de que las pruebas encontradas sugirieran la ingestión de drogas y/o alcohol como posible causa del accidente. Aunque Irons apoyó en público la suspensión de la escuadra de élite, los documentos hallados indican que Irons planeaba amenazar al alcalde Michael Warren y a otros miembros del consejo de la ciudad con soltar varios productos químicos volátiles y extremadamente peligrosos a menos que cumplieran ciertas demandas económicas. Weeks continuó diciendo que Irons tenía un historial de inestabilidad emocional, y que los documentos, la correspondencia entre Irons y uno de sus cómplices, revelaban un plan diseñado por Irons para extorsionar y pedir un rescate al equipo de la alcaldía, y después huir del país. El cómplice sólo aparece como «C.R.», pero también aparecen numerosas referencias a «J.V», a «B.B.» y a «R.C.». Todas ellas son las iniciales de cuatro de los cinco miembros de STARS suspendidos.
Terrence Chavez declaró: «Si suponemos que estos documentos son verdaderos, Irons y los suyos habían planeado atacar la planta de Umbrella a finales de septiembre, lo que correspondería exactamente con la fecha establecida por el doctor Heiner como la de mayor propagación del "síndrome de Raccoon". Ahora mismo estamos trabajando con la hipótesis de que se produjo el asalto, y que ocurrió un accidente inesperado con unos resultados catastróficos. Todavía no sabemos si el señor Irons o alguno de los miembros del equipo de STARS sigue con vida, pero se les busca para interrogarlos. Hemos establecido una orden de búsqueda y captura a nivel nacional, y todos nuestros aeropuertos internacionales, las aduanas y las patrullas fronterizas han sido alertadas. Le pedimos a cualquiera que tenga información sobre este caso que la haga pública».
El doctor Heiner es un microbiólogo famoso además de miembro asociado de la División de Materiales Biopeligrosos, y declaró que la composición y la combinación exacta de productos químicos vertidos en Raccoon City quizá no se sepa nunca: «Es obvio que Irons y los suyos no tenían ni idea de lo que estaban manejando. El problema es que Umbrella está continuamente investigando y desarrollando nuevas variantes de síntesis de enzimas, cultivos bacterianos y represores virales, por lo que el componente letal fue, prácticamente sin duda, un añadido accidental. Las posibles combinaciones de materiales se elevan a millones, por lo que las probabilidades de reproducir con éxito la mezcla causante del "síndrome de Raccoon" son infinitesimales».
El director nacional de los STARS no ha efectuado ninguna declaración, pero Lida Willis, la portavoz a nivel regional de la organización, ha dicho que están «asombrados y entristecidos» por el desastre, y que van a dedicar a todos sus agentes disponibles a la búsqueda de los miembros desaparecidos del equipo de STARS, además de cualquier contacto del que pudieran disponer todavía en su círculo de trabajo.
Lo que resulta irónico es que los documentos fuesen encontrados por uno de los equipos de búsqueda de Umbrella Corporation…

Nationwide Today, 10 de octubre de 1998

SIGUE AUMENTANDO LA CIFRA DE MUERTOS EN RACCOON CITY TRAS LOS ESFUERZOS COMBINADOS DE LOS EQUIPOS DE BÚSQUEDA Y RESCATE


Nueva York, NY — El recuento oficial de muertos casi llega a 4.500, aunque las ennegrecidas ruinas de Raccoon City siguen siendo registradas en búsqueda de más víctimas de los hechos apocalípticos que tuvieron lugar la mañana del pasado domingo. Mientras la nación comienza su período de luto, más de seiscientos hombres y mujeres trabajan para desvelar las razones que provocaron la destrucción de la antaño pacífica comunidad. Las organizaciones de ayuda local, los científicos, los soldados, los agentes federales y los equipos de investigación de las distintas compañías se han unido en una muestra de afán y resolución, aunando sus recursos y aceptando las responsabilidades que se les han asignado para poder esclarecer la verdad.
Al director de
la ANCD, Terrence Chavez, que es el máximo responsable de la operación conjunta, se le han unido investigadores de máximo nivel de los centros de control de enfermedades de todo el mundo, agentes de seguridad nacional de distintas organizaciones federales y un equipo privado de microbiólogos procedente de Umbrella Corporation, financiado por la misma compañía farmacéutica, y que está investigando la posibilidad de que exista una conexión entre su laboratorio químico situado en las afueras de la ciudad y la extraña infección conocida ya como el «síndrome de Raccoon».
Los estudios iniciales sobre la enfermedad han sido imprecisos y no han llegado a ninguna conclusión, según palabras del jefe del equipo de Umbrella, el doctor Ellis Benjamin, pero también dice textualmente que «sin embargo, estamos convencidos de que los ciudadanos de Raccoon City resultaron infectados por algo, ya fuese de modo accidental o intencionado. Lo único que sabemos con certeza en este momento es que no parece transmitirse por vía aérea, y que el resultado final es una rápida desintegración celular y la muerte. Todavía desconocemos el hecho de si se trata de una infección bacteriana o vírica, o cuáles son los síntomas, pero no descansaremos hasta que hayamos agotado todos nuestros recursos. Sean cuales sean los resultados de la investigación, nos hemos comprometido a llegar hasta el final. Es lo menos que podemos hacer, si tenemos en cuenta lo mucho que nuestra compañía le debe a la gente de Raccoon City». La planta química y las instalaciones administrativas de Umbrella Corporation proporcionaban casi un millar de puestos de trabajo a la localidad.
Los ciento cuarenta y dos supervivientes siguen bajo estricta cuarentena para ser interrogados y sometidos a una estricta observación en un lugar desconocido. Aunque sus nombres siguen siendo un secreto, el FBI ha publicado una lista en la que se indican las diferentes condiciones médicas en las que se encuentran. Diecisiete supervivientes han sufrido tan sólo algunas heridas leves y se encuentran en situación estable, setenta y nueve todavía se encuentran en estado crítico tras tener que sufrir operaciones quirúrgicas, y cuarenta y seis, aunque no han resultado heridos, han sufrido alguna clase de colapso mental o de crisis nerviosa. No se ha confirmado si están o no infectados con el síndrome, pero la declaración incluye una referencia a los relatos de los supervivientes que confirman la existencia de esa infección.
El general Martin Goldman, supervisor a cargo de todas las operaciones militares en la ciudad devastada, mantiene la esperanza de que todas las personas que todavía se encuentran desaparecidas serán encontradas en los próximos siete días. «Ya tenemos a cuatrocientas personas distribuidas en equipos que están trabajando veinticuatro horas al día todos los días en busca de supervivientes y realizando comprobaciones de identidad. Y me acaban de decir que llegarán otras doscientas el lunes por la mañana…»

Associated Press, 6 de octubre, 1998

MUEREN MILES DE PERSONAS EN EL TERRIBLE INCENDIO DE UN PUEBLO DE LAS MONTAÑAS. SE SOSPECHA DE UN BROTE INFECCIOSO



Nueva York, NY — La aislada comunidad montañosa de Raccoon City, Pensilvania, ha sido declarada oficialmente zona catastrófica por el estado y por los funcionarios del gobierno federal mientras los esforzados bomberos siguen luchando contra las llamas, cada vez menores, y la cifra de muertos sigue creciendo. Ahora mismo se calcula que más de siete mil personas murieron por las explosiones y los incendios que azotaron Raccoon City desde las primeras horas del domingo 4 de octubre. Este hecho es considerado como el peor desastre en Estados Unidos en términos de pérdidas de vidas humanas desde el comienzo de la era industrial. Los destrozados familiares y amigos de los ciudadanos de Raccoon City, llegados al mismo tiempo que las organizaciones nacionales de ayuda y la prensa internacional, se agolpan alrededor del bloqueo que rodea a las ruinas todavía en llamas de la ciudad, a la espera de alguna noticia procedente de la cercana población de Latham.
El director de
la Agencia Nacional de Control de Desastres (ANCD), Terrence Chavez, que actúa como coordinador de los esfuerzos combinados de las distintas unidades de bomberos y de emergencia, efectuó una declaración oficial a la prensa la noche pasada en la que dijo que, salvo complicaciones imprevisibles, se espera que los incendios quedarán extinguidos por completo a mitad de semana, pero que pueden pasar bastantes meses antes de que se pueda averiguar con certeza cuál ha sido el origen del fuego, tanto si fue intencionado como si no. Según Chavez, «la magnitud de los daños, tan sólo en términos de superficie afectada, va a motivar que encontrar las respuestas sea una tarea ardua, pero esas respuestas están ahí. Llegaremos hasta el fondo de la cuestión sin importar lo que haga falta».
A fecha de hoy, a las seis de la mañana, la cifra de supervivientes es de setenta y ocho, y sus nombres y el estado en que se encuentran se ha mantenido en secreto. Han sido trasladados a una instalación federal desconocida para permanecer en observación y/o recibir tratamiento. Los primeros informes de los equipos de emergencia indican al parecer la existencia de una enfermedad desconocida que puede haber sido la causante del increíble número de víctimas, ya que los ciudadanos infectados no pudieron escapar debido a la gravedad de la dolencia. Además, existen rumores que indican que la enfermedad puede haber provocado una psicosis de tipo violento en algunos de los pacientes infectados. Los funcionarios de las agencias de control de enfermedades, tanto públicas como privadas, han pedido que se extiendan los límites de la cuarentena, y aunque no se ha hecho ninguna declaración oficial en ese sentido, se han «filtrado» numerosas descripciones de las anormalidades físicas y biológicas de las víctimas. Según una de las fuentes, un trabajador de un equipo de asesoramiento federal dijo que «algunas de esas personas no habían muerto simplemente quemadas o asfixiadas por la inhalación de gases. Vi a gente que había muerto por disparos o por apuñalamiento, además de por otras formas de violencia. Vi a individuos que era evidente que habían estado enfermos, muertos o moribundos antes de que les alcanzasen las llamas. El incendio ha sido terrible, devastador, pero no es el único desastre que se ha producido aquí, me apuesto lo que sea».
Raccoon City fue noticia a principios de este año debido a una serie de extraños asesinatos que conmocionaron a la población. Se trataba de crímenes sin móvil aparente, de una tremenda violencia, y bastantes de ellos incluían actos de canibalismo. Ya se están produciendo por parte de la prensa local cercana a Raccoon City, intentos de relacionar los once asesinatos sin resolver del pasado verano con los rumores de actos violentos en masa que se produjeron antes de que estallara el enorme incendio.
El señor Chavez se negó a confirmar o desmentir esos rumores, y se limitó a declarar que las investigaciones relativas a esa tragedia serán exhaustivas…